Año nuevo, vida nueva

Las muchas informaciones de todo orden que se vienen dando a través de este periódico, especialmente para quienes residimos a más de diez mil kilómetros de nuestra tierra, hoy nos llenan de alegría, como viejos hijos de la Soacha inolvidable.


Veamos, por ejemplo, para empezar, que la Cadena CAR y Alcaldía Municipal firmaron un convenio de cooperación para la reforestación y embellecimiento de zonas verdes cercanas al área de influencia del Proyecto Subestación Compartir, que comprende un área del Río Soacha, que implica una inversión de setenta y ocho millones de los cuales la Compañía aporta 61.

El Gerente de Condesa trae importantes beneficios sociales y ambientales en la Zona donde opera tal Empresa y con la colaboración de CAR en asistencia técnica para la reforestación. La Alcaldía Municipal prestará asistencia técnica para la identificación de especies de plantas. Quiere esto decir, que es importantísimo, y que los niños de Soacha no volverán a preguntar a sus padres. ¿Qué es un árbol?”

De todos modos, en lo que corresponde a este servidor, lo cree, a pesar de lo que piensa don Juan de Mairena cuando señala que: “Lo corriente en el hombre es la tendencia a creer verdadero cuanto le reporta alguna utilidad; por eso hay tantos hombres capaces de comulgar con ruedas de molino.” Y, además, el haber pasado más de 100 años sin que en Soacha se haya cumplido nada de lo propuesto por las autoridades, nos hacemos más incrédulos. ¿Verdad apreciado lector?

De otra parte, y esto es ya una verdad absoluta, con el fin de rescatar un símbolo cultural, dice este periódico, que representará la “ancestralidad” y origen histórico del Municipio, se erigió en el Parque Principal la escultura de un Cacique muisca parado sobre una simulación de la piedra en donde está la imagen del Varón del Sol.

Criticada por muchos y exaltada por otros, poco a poco se va convirtiendo en un punto emblemático de la Plaza Principal, que nos recuerda nuestro origen que no podemos olvidar. Y hasta el relinchar de unos pocos, y perdóneseme la expresión, porque ignoran o quieren ignorar la historia de su tierra y a sus antepasados, y debían más bien dedicarse a conseguir su recuerdo permanente en ese sitio a quienes lo merecen, porque algunos que allí estuvieron fueron estatuas de la vergüenza y vergüenza para su pueblo.

Y aquí, hemos reservado este espacio, para hacer conocer de mi tierra la actividad que se desarrolla cuando hay funcionarios que llegan a la Alcaldía a trabajar y a servir a su pueblo como debe ser su obligación.

Ella se llama Olga Lucía Cantor, y es la Secretaria General de la Alcaldía y soachuna legítima como este humilde servidor y ha hecho un resumen de su labor para este periódico que, naturalmente sintetizó, pero que muestra su actividad y éxitos en su trabajo como debían ser todos los funcionarios del Municipio, y lo he tomado de este periódico. Dice, refiriéndose al tema:

“Este es un proyecto muy ambicioso, con una mentalidad, proyección y un resultado positivo en la vigencia 2.017. El posicionamiento de nuestra herramienta digital.
Soy soachuno es muy bueno, ya que está siendo utilizado no solo por las personas del común, sino en algunas Universidades e Instituciones educativas para que los muchachos entren y a través de las cartillas digitales que se encuentran allí, puedan conocerse , interiorizar y ver lo bello que es el Municipio. Entonces muy satisfecha de lo que se ha hecho y a la espera que en 2018 podamos mejorar aún mas el posicionamiento para que la gente se apropie de esta gran herramienta digital que está al servicio de toda la comunidad del Municipio de Soacha.

La invitación a todos los habitantes del Municipio es a que visiten nuestra herramienta digital www soysoachuno.com estamos prestos a escuchar sugerencias para entre todos mejorar está puesta en marcha tecnológica que se ha orientado al servicio de la comunidad de Soacha.”

Y para cambiar de tema, ¿el hospital qué?

“…………..como Gulliver, fue derribado por los liliputienses amiguitos llegados de Bogotá preparados para “el tumbe” por su propia ignorancia y ambición y ahí tenemos su resultado, contratación para el Hospital incumplida, al ser entregada a sus amiguitos y la risas y gritos por estos que sabían previamente los resultados del Hospital, pues se dieron a su brillante realización con el alcalde que les proporcionó hasta las oficinas de la Alcaldía y a funcionarios que le apostaron para “el trabajo” a sus brillantes amiguitos. ¿Y el ex alcalde qué?

Feliz sembrando papas en su tierra y prestando servicios de transporte y, naturalmente, muerto de risa por el bellísimo Hospital que se construirá en Soacha que conservaría una placa con su nombre por tal obra. Pero además, reclamando el permanente agradecimiento de sus familiares por la famosa urbanización de Terreros incluyendo a las que estrenaron sus hermanos. Loor y gloria a la mejor vida y a su sin igual trabajo en Soacha y a sus buenos amigos por entregarle los buenos funcionarios que reorganizaron la Administración Municipal. Loor y gloria a todos incluyendo a las autoridades locales.´

¿Y qué hará ahora el ex alcalde? Seguramente recorrer su pueblo y besar la mochila en unión de sus hermanos.

José Ignacio Galarza

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