ICBF trabaja por el bienestar y capacitación de las madres comunitarias

Un auxilio económico y la oportunidad de prepararse académicamente, son algunos de los beneficios que las madres comunitarias del ICBF reciben a cambio de mejorar la atención integral hacia niños y niñas que empiezan a vivir su primera infancia.


Hace algunos días, este medio publicó una nota que resaltaba la función de los hogares comunitarios y la manera como estos constituyen el primer acercamiento de niños y niñas frente a un ambiente pedagógico. Sin embargo, también hay que resaltar el trabajo de las madres comunitarias que atienden estos lugares y la manera como el ICBF las apoya y capacita para brindar un cuidado de calidad a los infantes que tiene bajo su responsabilidad.

Justamente esa es la duda que tienen algunas personas, como por ejemplo Adriana Garzón y Dayanna Joya, quienes desean saber cuál es el beneficio que las madres comunitarias reciben por dirigir un hogar comunitario y si realmente existen garantías en caso de que ellas decidan en algún momento de su vida vincular a algún hijo o hija a un hogar comunitario del ICBF.

“Quiero saber cómo se sostiene un hogar comunitario y si es verdad que las madres comunitarias deben comprar los alimentos para darle a los niños, esto lo pregunto porque he escuchado decir eso pero no lo he averiguado. No tengo hijos pero en caso de tenerlos contemplaría la opción de mirar si lo puedo matricular en un jardín o en un hogar del ICBF”, dijo la señora Adriana.

“Es necesario saber cómo se preparan las madres comunitarias porque ellas son las segundas madres para los niños que ingresan a un hogar del Bienestar, entonces si uno como mamá o papá no sabe en dónde mete a su hijo, está en nada”, agregó Dayanna.

Para responder a estas inquietudes, Katherine Medellín, psicóloga especialista en derecho de familia del ICBF, explicó que gracias a la regulación del gobierno nacional, a las madres comunitarias se les entrega un auxilio económico equivalente a un salario mínimo legal vigente, que además incluye todas las prestaciones de ley. Sin embargo esto no quiere decir que se constituya en un contrato laboral, aunque sí garantiza mejores condiciones de vida para ellas y por ende mayor calidad en la prestación del servicio.

“Cada año se reúnen los miembros de una asociación de padres de familia, quienes son los que administran la labor de las madres comunitarias. Allí se eligen los miembros de la junta directiva en cabeza de un representante legal que debe ser un Padre de familia usuario de los hogares comunitarios de Bienestar, también una tesorera que casi siempre es una Madre comunitaria que es quien vela por la seguridad del rubro económico que llega para la operación de los hogares, y de ahí en adelante otros cargos que tienen contacto directo con el ICBF”, señaló la especialista.

Además, esta junta directiva se encarga de realizar la compra de víveres, verduras, hortalizas y tubérculos, entre otros productos. Acto seguido se realiza la entrega a cada madre comunitaria. Vale la pena destacar que para cada niño o niña llega un rubro económico específico, el cual se controla a través de una minuta institucional que el ICBF entrega desde la sede nacional; esta minuta contiene el menú diario que se le debe preparar a los niños y hay que darle estricto cumplimiento debido a que va de la mano con el proceso alimentario que la nutricionista del centro zonal lleva con los infantes.

Respecto a la capacitación, la psicóloga explicó: “El ICBF tiene un convenio con la Universidad Iberoamericana, allí aquellas Madres comunitarias que sólo poseen el título de bachiller reciben formación académica donde usan técnicas en preescolar y se les brinda la oportunidad de estudiar su licenciatura, porque la idea es que vayan creciendo profesionalmente y que cada día se capaciten más”.

De igual modo y a la par que las madres comunitarias reciben formación educativa, el ICBF realiza visitas técnicas en las que se verifica que ellas estén aplicando los conocimientos adquiridos y dando cumplimiento a los lineamientos establecidos por la institución. De igual modo, que los niños niñas estén recibiendo actividad pedagógica de acuerdo al modelo de atención integral que se pretende implementar en ellos.

Si usted desea obtener más información sobre este tema, puede acercarse al Centro Zonal Soacha, ubicado en la transversal 15 con diagonal 33 (esquina), barrio Rincón de Santafé y allí el personal especializado lo orientará.

Siga a Periodismo Público en Google News. Suscríbase a nuestro canal de Whatsapp