Ladrones e infractores entran y salen sin problema de las estaciones de Transmilenio en Soacha

Sin ningún tipo de seguridad para los usuarios y sin el personal suficiente en las estaciones opera el sistema de transporte en Soacha. La evidencia se refleja en las puertas laterales que se supone son únicamente para el ascenso y descenso de pasajeros, pero al permanecer abiertas se convierten en el paso perfecto para los infractores y aquellos amigos de lo ajeno que entran y salen como pedro por su casa.


Un ejemplo de la negligencia e irrespeto de Transmilenio y del peligro que implica para el usuario tener las puertas de las estaciones abiertas se vivió este miércoles en la tarde en la estación Terreros.

Dos jóvenes de color ingresaron por una de las puertas que corresponde al G44; el único auxiliar que se encontraba en ese vagón se dio cuenta y de inmediato les hizo el reclamo. Comenzó una discusión que se prologó por no más de un minuto hasta que uno de los dos hombres se fue a las manos con el policía bachiller. Luego de cruzar golpes el joven agresor volvió a salir, pero esta vez lo hizo por la puerta del frente, que también se encontraba abierta.

El hecho puso en peligro la vida del auxiliar bachiller y nadie llegó en su apoyo. Ni otros policías, ni vigilantes de Transmilenio, ni personal de la Bogotá Humana apareció para ayudar al joven uniformado que se atrevió a reclamar.

Afortunadamente para él la gente salió en defensa y el agresor huyó. “No es la primera vez que pasa esto. A toda hora entra y sale gente por estas puertas y la verdad Transmilenio no hace absolutamente nada”, explicó Hilda González, residente en León XIII.

“Hace como ocho días entraron por esta puerta dos ladrones, le raparon el celular a un muchacho que estaba hablando dentro de la estación, salieron corriendo de nuevo y ya. La policía llegó como a los dos minutos pero la sola escandola porque el ladrón ya iría como en la Despensa”, sostuvo Cristóbal Sánchez, usuario del sistema.

“Transmilenio no le importa sino recibir el dinero y nada más. Si nos matan dentro de las estaciones parece que no es problema de ellos. Estas benditas puertas permanecen dañadas, abiertas a toda hora y por aquí entra y sale el que quiera”, explicó Amanda Moreno, residente en la comuna cinco de San Mateo.

Y como ellos, cientos de usuarios se quejan de la irresponsabilidad de Transmilenio al permitir que por las puertas de vidrio entre y salga el que quiera. Muchos incluso se atrevieron a reclamar el cobro del pasaje, si fácilmente se puede ingresar sin pagar. “Lo que pasa es que la gente honesta entramos por la caja y las registradoras para hacer las cosas legalmente, pero mismo Transmilenio permite este desorden, entonces en mejor entrar y salir por estas puertas y no pagar porque, como dice el dicho: ‘O todos en la cama, o todos en el suelo’”, agregó Omar Poveda, usuario del sistema.

Lo cierto es que Transmilenio no está siendo responsable con los usuarios en Soacha y el sistema que en otrora se vendió como una alternativa de transporte atractivo, ordenado, seguro y eficiente, hoy es sinónimo de desorden, caos, inseguridad y pésimo servicio.

Foto portada: Archivo PP

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